Hablar de la música de la que voy a hablar y tratar en el siglo XXI, concretamente en el año 2016, no tiene mucho sentido, ya que la inmensa mayoría de los que van a leer esto ya conocen los clásicos. O si, quizás si, quizás tiene sentido hablar y recuperar un genero de música que marcó una generación a nivel europeo, y que como ya hemos visto a lo largo de diferentes artículos marcó inevitablemente un antes y un después en la escena underground española.
La gente que me conoce sabe que mi principal foco de influencia no estaba en el mundo noruego, sino en la escena black metal polaca de los años 90. Una banda que en esos años me marcó profundamente con independencia de Graveland, fue Behemoth. El grupo con el paso del tiempo se ha convertido en una caricatura de lo que realmente fueron sus origenes, pero sus tres demos son realmente una obra de arte del black metal. Concretamente esta, The Return of the northern moon, es una de las mejores demos que yo recuerdo de aquellos años. Me dejo profundamente enganchado a su sonido y a su estilo, oscuro pausado, pero 100% lleno de esencia black metal vieja escuela, que como el vino gana con los años.
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